Bajar, ganar, y volver a subir.

A pesar de todo lo maldecido
A pesar de todo los errores
cometidos.
A pesar de todos los papelones,
A pesar de todas las verguenzas.

A pesar de todas las lágrimas derramadas,
A pesar de todos los malhumores.
¡Y hasta a pesar de los desamores!

A pesar de todo lo dolido
A pesar de todo lo marcado
con dolor,
con pena,
con bronca.

A pesar de todo lo que me arrepiento
A pesar de todo lo que desmiento
A pesar de todas las mentiras,
crudas,
inexistentes,
duras,
A pesar de todo lo que
no salió como pensaba,
A pesar de los finales
que no esperaba,
A pesar de todo lo que
deseé que suceda
pero no sucedió.
A pesar de todos esos sueños,
que en realidad, nunca se convirtieron.
A pesar de todas esas pesadillas,
de todos esos insomnios,
de todas esas fotografías,
y esos odios.

A pesar de nada y de todo,
agradezco infinitamente,
tener la oportunidad de vivir.
¿Para qué?
Para sentir,
Para soñar,
Para llorar,
Para dormir,
Para mirar,
Para saltar la soga,
Para esperar a las
maripositas en la panza.
Para sentir a la piel de gallina.
Para emocionarse.
Para quedarse vacía
y volver a llenarse,
Para crear,
Para involucrarse en el arte,
Para mirar millones de películas,
Para escuchar miles de melodías,
Para amar,
Para aborrecer,
Para pensar,
Para subir escalones,
Bajar uno,
ganarlo,
Y finalmente,
hasta el final de los tiempos,
subir.